Cómo afeitarse la barba correctamente

¿Sientes que el afeitado es una tarea demasiado tediosa o un momento desagradable con el que tienes que lidiar cada día? ¿Te gustaría acabar con los pelos encarnados, las rojeces o la sensación de ardor? ¿Y si te decimos que con unos cuantos consejos puedes convertir tu afeitado en una experiencia agradable y hasta relajante?

En este tutorial encontrarás los 8 pasos para un afeitado perfecto. Si tienes la barba larga debes acortar primero la barba con una recortadora antes de empezar el tutorial.

1. Prepara tu piel para el afeitado.

Lo ideal es que te afeites después de una buena ducha caliente. Si no tienes tiempo de ducharte, aclara la cara con agua tibia para abrir los poros y ablandar el vello. De lo contrario, aplique una toalla caliente en la cara durante unos 3 minutos.

Para un mejor afeitado, se recomienda exfoliar la piel una o dos veces por semana para eliminar todas las células muertas y otras impurezas.

2. Aplicar un producto de afeitado.

Para que la maquinilla de afeitar se deslice suavemente sobre la piel, tendrás que aplicar un producto de afeitado: espuma de afeitar, gel de afeitar, crema de afeitar o jabón de afeitar. 

Todo depende de sus preferencias, pero en cualquier caso, elija productos de composición natural para evitar irritaciones. Aplique el producto de afeitado con movimientos circulares sobre la piel para cubrir todas las zonas a afeitar.

3. Aféitate la barba en la dirección del pelo.

Para encontrar la dirección del vello, utiliza tu dedo para hacer los mismos trazos que harías con la maquinilla de afeitar. Si los pelos ofrecen poca resistencia, vas en la dirección del pelo. Si sientes resistencia, vas por el camino equivocado.

Afeita en la dirección del vello para una mayor comodidad con pequeñas pasadas, no hagas grandes pasadas como en los anuncios. Esto también te ayudará a evitar la irritación y los pelos encarnados.

Si utilizas una maquinilla de afeitar recta de barbero o una maquinilla de afeitar de seguridad, la hoja debe entrar en contacto con la piel en un ángulo de unos 30 grados para garantizar tanto un recorte óptimo del vello como un menor riesgo de cortes.

4. Aféitate el bigote.

Para afeitarse el bigote, aprieta los labios para que la piel esté tensa. Aféitate primero de arriba abajo, en el centro del bigote. A continuación, afeitar hacia los lados, de nuevo de arriba hacia abajo.

Puedes hacer una segunda pasada, esta vez afeitando en un ligero ángulo, siempre de arriba hacia abajo. Para ello, recuerda volver a aplicar tu producto de afeitado antes de afeitarte y limpiar la cuchilla de afeitar con regularidad para eliminar el pelo y la acumulación de productos de afeitado.

5. Aféitate el cuello.

Aféitate el cuello de abajo hacia arriba, que es generalmente la dirección del crecimiento en esta zona. Realiza pequeñas pasadas y, si crees que ya no estás afeitando en la dirección del vello, gira la maquinilla y realiza pasadas en la otra dirección.

Durante todo el proceso de afeitado, no es necesario presionar la maquinilla. Causará más problemas que otra cosa. Si necesitas presionar, es que tu hoja ya no está lo suficientemente afilada.

6. Aféitate las mandíbulas.

Las mandíbulas pueden ser un lugar especialmente difícil de afeitar. Si tienes dificultades para afeitarte las mandíbulas, no dude en estirar la piel con la otra mano, para que ya no le moleste el ángulo que se forma en esta zona.

Si decides hacer una segunda pasada de afeitado, no olvides volver a aplicar el producto de afeitado sobre la piel.

7. Aclarar la cara con agua fría.

Aclara la cara con agua fría para eliminar los restos de producto de afeitado y cerrar los poros. Sécate la cara con una toalla en lugar de frotarla. De esta forma, serás más evitarás rojeces e irritaciones.

8. Aplicar aftershave.

Una vez que hayas terminado de afeitarte, recuerda cuidar tu piel. Aplica piedra de alumbre, por ejemplo, para ayudar a que tu piel se cure y se calme.

Si quieres usar un aftershave, como un bálsamo, elige uno que sea preferiblemente natural y sin alcohol. Tu piel te lo agradecerá. Después del afeitado, es muy importante hidratar la piel. Para calmar la piel y evitar la tirantez o el enrojecimiento, aplica una crema hidratante.